Analiza las siguientes estrofas. Recuerda: cómputo silábico, estructura y rima.
Yo no sé si eres muerte o eres vida,
si toco rosa en ti, si toco estrella,
si llamo a Dios o a ti cuando te llamo.
Junco en el agua o sorda piedra herida
solo sé que la tarde es ancha y bella,
solo sé que soy hombre y que te amo.
DÁMASO ALONSO
Quedeme y olvideme,
el rostro recliné sobre el Amado;
cesó todo, y dejeme
dejando mi cuidado
entre las azucenas olvidado.
SAN JUAN DE LA CRUZ
La luna vino a la fragua
con su polisón de nardos.
El niño la mira, mira.
El niño la está mirando.
En el aire conmovido
mueve la luna sus brazos
y enseña, lúbrica y pura,
sus senos de duro estaño.
FEDERICO GARCÍA LORCA
Inevitables golosas.
Vosotras, moscas vulgares,
me evocáis todas las cosas.
¡Oh, viejas moscas voraces,
como abejas en abril,
viejas moscas pertinentes
sobre mi calva infantil!
ANTONIO MACHADO
Cuentan de un sabio que un día
tan pobre y mísero estaba
que sólo se sustentaba
de unas yerbas que comía.
¿Habrá otro —entre sí decía—
más pobre y triste que yo?
Y cuando el rostro volvió
halló la respuesta, viendo
que iba otro sabio cogiendo
las hojas que él arrojó.
CALDERÓN DE LA BARCA
Si queréis historia humana
de la dama y el galán
que peregrinando van
por senda segura y llana.
LOPE DE VEGA
Las fuerzas, Peregrino celebrado,
afrentará del tiempo y del olvido
el libro que, por tuyo, ha merecido
ser del uno y del otro respetado.
FRANCISCO DE QUEVEDO
Vivo sin vivir en mí,
y tan alta vida espero,
que muero porque no muero.
Vivo ya fuera de mí,
después que muero de amor;
porque vivo en el Señor,
que me quiso para sí:
cuando el corazón le di
puso en él este letrero,
que muero porque no muero.
Esta divina prisión,
del amor en que yo vivo,
ha hecho a Dios mi cautivo,
y libre mi corazón;
y causa en mí tal pasión
ver a Dios mi prisionero,
que muero porque no muero.
(...)
SANTA TERESA
Una tarde parda y fría
de invierno. Los colegiales
estudian. Monotonía
de la lluvia en los cristales.
ANTONIO MACHADO